
Inclusive las guardias de seguridad mujeres se sienten incómodas con sus compañeros: alumnas de Antropología
A un año de las 15 denuncias de alumnas de la Escuela de Antropología e Historia del Norte de México (Eahnm) por acoso por parte de guardias de seguridad, exigen que las empresas que los contratan se hagan responsables y tomen las medidas adecuadas para que no vuelva a suceder.

El 5 de marzo de 2018, alumnas de la Escuela de Antropología e Historia del Norte de México (Eahnm), denunciaron públicamente el acoso que sufrían por parte de guardias de seguridad de dicha institución, agresiones que empezaron a registrarse desde 2017.
Las estudiantes organizadas expresaron que en octubre de ese año habían presentado un oficio dirigido al entonces director Emiliano Gallaga Murrieta, quien pidió a la empresa de seguridad el cambió de los guardias denunciados por acoso.
En entrevista, una de las denunciantes compartió que en 2018 el tema fue atendido por la secretaria académica del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Aída Castilleja, quien afirmó que con el cambio de guardias de seguridad el asunto ya se había resuelto, y no había necesidad de proceder de otra forma.
En este momento las estudiantes decidieron denunciar los casos ante la Fiscalía Especializada de las Mujeres, por lo que agentes de dicha unidad acudieron a entrevistar a maestros y alumnas a la escuela, sin embargo, no están enteradas de lo que sucedió con el resto del proceso.
El cambio de guardias de seguridad no ha evitado que el acoso continúe

Al correr a los guardias que ejercieron violencia en contra de las alumnas, una de las denunciantes, mencionó que siguen dándose estos casos, y piden que el servicio de seguridad que se contrata desde México certifique y capacite a su personal para evitar estas acciones.
En muchas ocasiones los guardias que llegan incomodan a las estudiantes con su «piropos», comentarios o miradas lascivas, explicaron las alumnas y propusieron que se hiciera un parámetro de las personas que eran contratadas para estos puestos, sin embargo, de la Dirección se les dijo que no se podía hacer eso porque eran empresas subcontratadas.
La entrevistada, expresó que ellas sentían que la solución a dicha problemática no era la adecuada, pues sigue habiendo acosos a las estudiantes, inclusive cambiando de guardias. Cabe señalar que los anteriores fueron trasladados a una preparatoria.
Explicó que la nueva administración, encabezada por la directora Cen Montuy, había enfatizado en que les apoyaba, sin embargo, por órdenes del director Diego Prieto, del INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia) y la secretaria académica del INAH, Aída Castilleja, se estableció que no se puede hacer nada en contra la compañía a la que pertenecen los guardias de seguridad, es por ello que siguen teniendo discusiones con ellos por el acoso.
Aunado a esto, mencionaron, no sólo las alumnas son afectadas por la agresión de los guardias de seguridad, también los son sus propias compañeras, las guardias mujeres.
Como un seguimiento integral sobre los casos, las alumnas decidieron buscar más información respecto a los antecedentes penales que tenían los guardias, por lo que se acercaron a la Fiscalía Especializada de las Mujeres para obtener dicha información, pero se les fue negada, así que desconocen si los guardias que estuvieron involucrados tienen antecedentes penales.