
El día 1 de septiembre la delegada Azucena Ruíz Zúñiga renunció a la Delegación de la Comisión de Derechos de Pueblos Indígenas
La delegada asumió el cargo en octubre del año 2014, a inicio de su administración se tenían altas expectativas, sin embargo, con el tiempo todo fue diluyendo ya que fue deshaciendo a su equipo de trabajo poco a poco y empezaron los problemas al interior de la comisión con la desconfianza con las personas que laboraban ahí.

Fue entonces que la delegada empezó a seleccionar nuevo personal que conformaran su equipo operativo, hubo algunos señalamientos que las nuevas personas no tenían experiencia en atención a pueblos indígenas ni conocimiento acerca del tema.
Hace aproximadamente dos semanas la delegada viajó a la Cd. de México y cuando regresó varios de sus colaboradores le pidieron su renuncia, por lo que el 1 de septiembre entregó su cargo en pleno proceso de auditoría de la Comisión Estatal de Derechos de Pueblos Indígenas.
Una de las cosas que marcó la administración de Ruiz Zuñiga, fue una queja interpuesta en su contra en la Comisión Estatal de Derechos Humanos. El motivo fue por actos que violaban los derechos de los pueblos indígenas, ya que cuando eran citados no se les atendía en las horas acordadas sin importar que para las personas implicaba esfuerzo físico, así como en recursos económicos para llegar a la cita en la Cd. de Chihuahua.
La atropellada gestión de Azucena Ruíz estuvo marcada por las inconformidades y las quejas acalladas por el temor a su carácter vengativo, dentro de ello se mencionó la entrega de alimentos podridos a los albergues donde niñas y niños indígenas se hospedan. Esta irregularidad surgió luego de que la delegada cambiara de manera discrecional a los proveedores de alimento fresco, negándose a informar quienes eran los nuevos proveedores ademas de negarse a solicitar el reenvío de consumibles en buenas condiciones.
Se mencionó también el retraso y pérdidas de pagos en la becas de estudiantes universitarios indígenas, en los casos que se entregaron, se realizaba con suma irregularidad. Así como el retraso intencional en la entrega de recurso aprobado por la CDI para la construcción de una Casa de la Mujer indígena en Creel, municipio de Bocoyna, en este caso la Comisión aprobó el recurso desde mayo del 2016, sin embargo fue entregado a la asociación de mujeres indígenas hasta agosto, con la encomienda de terminar la construcción para diciembre bajo amenaza de que el no terminar en 5 meses la construcción se fincaría responsabilidad legal.
Así mismo el 15 de marzo del año 2017 las instalaciones de la CDI, fueron tomadas por integrantes de la Unión Campesina Democrática, quienes exigían la renuncia de Elogio Morales Terrazas, titular de la oficina de la coordinación de la Comisión del Municipio de Carichí y fue cuando se dieron cuenta de la ausencia de la delegada en la CDI.
Por otra parte, el 5 de septiembre, se dio a conocer al nuevo delegado de la CDI, Ismael Díaz quien fue alcalde del municipio de Guachochi de 1992-1995, Diputado Local, 1995-1998, así mismo perteneció a la Secretaria de Desarrollo Municipal y estuvo en la Coordinadora Estatal de la Tarahumara.
Es de destacar que la salida de la delegada Ruíz Zúñiga fue sorpresiva al igual que la llegada del nuevo delegado de la CDI.
Lo único malo es que la manden a otra dependencia y la heche s perder ya que al igual que peña nieto las mentiras se cuentan y las seguiran contando